jueves, 30 de septiembre de 2010

"Volver a empezar" es muy Alejandro Lerner ¿no?

sí, ahí, al fondo a la izquierda

Desde hace un par de años, quien haya navegado por Internet se habrá dado cuenta que los blogs se abren y se cierran así, de un día para el otro. Mucho mueren sin más que un puñado de historias, algunos marcan etapas y cuando estas llegan a su fin, la bitácora(?) muere de muerte natural.

La mía no ha sido la excepción y también abrí y cerré un blog. Hay un par que siguen abiertos, ahí, maltrechos y sobreviviendo de a una dosis por mes, o a veces menos.

Pero hoy, primer día post renuncia, me dieron ganas de empezar uno. En realidad de retomar uno anterior, aquel que había nacido con la idea de ser un espacio para la escritura libre. Sin corsets temáticos y sin la necesidad del día a día, del minuto a minuto. O sea, una vagancia (!). Un lugar para escribir largo, o corto, eso se irá viendo.

El nombre, todavía no lo se. Depende tanto de mí como del servidor. Voy a intentar con La Vida en Una Crónica, el nombre de aquel primero. Pero bueno, si en la barra del navegador aparece otra cosa, ya saben a quien putear (?)

En esto estamos entonces, en la búsqueda incesante de la felicidad, en este ir y venir por las misceláneas de la vida. En el medio, el devenir del tiempo (modo Bucay off). Entonces, se cerró una etapa, la del primer laburo serio y por ende la primer renuncia formal, con carta, firma y toda la bola.

La cosa es qué hacer ahora, estudiar, intentar laburar o escribir un blog (?), y si, la más fácil es escribir un blog, así que hagamos esa. Total, la guita, los puchos y las minas sobran dijo un amigo. A vos te sobrarán loco, yo hago malabares y eso que no fumo.

¿Hasta acá está bien para una presentación? Bueno espero que si, de última avisame y vemos cómo lo resolvemos (?).

Y que sea lo que tenga que ser.